Nuestro Equipo

Eric Haas

fundador + director

Primal Nature nació de una vida entera de estudio y experimentación, una búsqueda constante de la manera de vivir la vida más completa, rica y profunda posible. 

Yo, Eric, nací como la mayoría de la gente en este mundo supuestamente desarrollado, libre y perdido al mismo tiempo. Podía ir a todas partes y hacer casi cualquier cosa, pero carecía de un propósito que guiara mis esfuerzos. Pasé parte de mi juventud explorando el mundo de una forma un tanto caótica y caprichosa, sin pararme siquiera a considerar el sentido real de lo que estaba haciendo o a dónde estaba yendo.

Tanto si decidimos dedicarnos a conseguir riqueza material, iluminación espiritual, una posición social, placeres sensoriales o cualquier otra cosa, la experiencia me ha demostrado que inevitablemente, llega el momento en el que nos damos cuenta de que las reglas del juego que hemos construido han resultado no ser de fiar. El premio que buscamos puede ser muy vistoso, pero nunca es suficiente. 

Cuando vivimos agarrados a nuestros miedos y deseos o nuestros patrones idiosincráticos de pensar, sentir y actuar (las cicatrices existenciales con que solemos confundir nuestro ser), antes o después, la vida comienza a perder su valor y su sentido; comenzamos a sentirnos perdidos, huecos o enfermos. El juego se revela como una farsa de punta a cabo.

Si tenemos la suerte de darnos cuenta de esto en una fase temprana de la vida, puede resultar bastante tentador comportarse de forma un tanto engreída. “El que conoce camina entre los hombres como entre los animales que son” dijo Nietzsche sin asomo de crítica. Esta clase de estridente egoísmo pseudo-espiritual no ha hecho otra cosa que dispararse en nuestros días. Pero la simple comprensión, que muy a menudo confundimos con iluminación, no basta. Después de todo, este no es un problema fácil de resolver; puedes abandonar el mundo corporativo y lanzarte al espiritual o viceversa, pero la verdad es que cada vez que pensamos que hemos alcanzado a ver más allá de nuestras limitaciones, encontrado una respuesta o descubierto algo relevante en torno a lo cual podemos estructurar nuestras vidas, si no nos engañamos a nosotros mismos y seguimos indagando, acabamos dándonos cuenta de que lo único que hemos hecho es meternos en otro juego más sutil, en una caja construida de forma aún más intrincada. El mito de Sísifo viene aquí como anillo al dedo.

En otras palabras, Primal Nature no se fundó para vender soluciones mágicas, porque no hay soluciones mágicas. La vida es difícil y compleja, y de un modo u otro siempre va a ser así. Pero una vez que lo aceptamos, nuestra búsqueda de propósito, abundancia y profundidad no termina. Lo que hace es cambiar el tono. En lugar de correr atropelladamente tras un objetivo final que se nos escapa entre los dedos, nuestro viaje pasa a ser algo más calmado, estable y profundamente poderosa. Puede que Sísifo nunca haga cumbre, pero se hace más fuerte más sabio cuanto más tiempo persiste en su empeño. Cuando aceptamos, en nuestro fuero interno, que no hay soluciones mágicas, es cuando empezamos a vislumbrar la posibilidad de que puede que tampoco haya ningún problema mágico que resolver.

Primal Nature fue creada cuando mi proceso de búsqueda personal alcanzó un punto de inflexión, una transición. Igual que sucede con cualquier otra pasión que crece y se desarrolla, llega el momento en que para poder seguir creciendo tiene que ser compartida. Igual que un árbol, he ido hundiendo mis raíces más profundamente, alzando mis ramas más alto, nutriéndome hasta rezumar energía. Ahora ha llegado el momento en el que estoy preparado para compartir los frutos de mi trabajo. 

En Primal Nature nos dedicamos a indagar en las profundidades de la existencia humana y explorar las fronteras de la experiencia, que siempre se cierne sobre el horizonte.

Todas nuestras acciones están basadas en un único principio que es, al mismo tiempo, simple y riguroso: la verdadera medida de la calidad de vida que vivo es la cantidad de amor que puedo aportar al mundo. Aspiramos siempre a cumplir con las palabras de Kahlil Gibran, quien nos dice que “el trabajo es el amor hecho visible.” 

Te han dicho que la vida es tinieblas, y en tu cansancio repites lo que dijeron los cansados.

Y yo digo que la vida sí es tinieblas salvo cuando hay impulso,

Y que todo impulso es ciego salvo cuando hay conocimiento,

Y que todo conocimiento es vano salvo cuando hay trabajo,

Y que todo trabajo es vacío salvo cuando hay amor.

Kahlil Gibran

Blanca Dasi Espuig

Tras una carrera profesional en los principales estudios de arquitectura del Reino Unido y los Estados Unidos, Blanca se ha establecido en la vanguardia de Internal Family Systems, o terapia IFS. Utiliza este enfoque innovador, basado en la evidencia científica, para ayudar a las personas y a las organizaciones a llegar eficazmente a la raíz de sus dificultades y, a partir de ahí, desarrollar soluciones eficaces.

Nils Maes

Nils ha sido bailarín profesional en las compañías más respetadas de Europa, y de allí se ha formado con maestros de artes marciales y meditación en los montes de Asia. Ha dedicado muchos años a aplicar su disciplina mental y físico al desarrollo de una visión rigurosa del bienestar y rendimiento humano.

Yury Opendik

Yury viene del mundo de informática y finanzas, y tras años de trabajar en una serie de multinacionales, empezó a diversificarse en una amplia gama de disciplinas. Es profesor de yoga, entrenador del Instituto CHEK e instructor del Método Wim Hof. Yury vive con su familia en Florida; se puede encontrar más información en su página aquí.

Mis acciones son mis únicas verdaderas pertenencias.

Thich Nhat Hahn